Edificio en obras en las inmediaciones de Arroyo del Moro, en una imagen de archivo
El órgano colegial ofrece a sus técnicos para descongestionar el trabajo y agilizar los permisos ante el parón de las obras
«La Gerencia de Urbanismo nunca ha sido ágil a la hora de tramitar las licencias de obra, pero ahora está tocando techo». Así lo manifiesta el secretario del Colegio de Arquitectos, Juan Eusebio Benito, quien informa a ABC de la preocupación existente en el colectivo por los «retrasos» en la concesión de las licencias de obra o actividad, que son las que más tramitan estos profesionales.
Esta problemática fue abordada en la última junta de gobierno del órgano colegial, donde, aparte de exponer el problema, también se abordaron las posibles soluciones para descongestionar el «bloqueo de expedientes, algunos pendientes de la concesión de licencia desde julio del año pasado», indicó Benito.
El resultado de este debate fue el ofrecimiento a la Gerencia de Urbanismo de vías de colaboración para agilizar trámites. Los arquitectos llegaron al acuerdo de trasladar un escrito al presidente de la Gerencia de Urbanismo, Luis Martín, para solicitarle «una reuniónen la que podamos estudiar la inaplazable y urgente solución al problema».
En ese escrito, que ha sido difundido a través de las redes socialesy que ayer fue entregado en el registro de entrada de la Gerencia, se hace mención a las líneas de colaboración existentes en otras ciudades, en las que los órganos colegiales colaboran en la tramitación de las licencias o asumen parte de estas competencias mediante la externalización del servicio, una medida que, según fuentes consultadas por ABC, permite la legislación vigente.
Arquitectos con competencias
El planteamiento que propondrán los arquitectos, según indicó el secretario del Colegio de Córdoba, es la de asumir más competencias en el visado de proyectos que realizan hasta ahora para descargar así de trabajo a los técnicos municipales. «Ahora mismo el visado de documentos que hacemos es muy limitado, porque así nos lo impone la ley, pero nosotros abarcamos más y controlamos más aspectos de los que debiéramos», indica Benito, quien señala que, aún así, cuando ese proyecto llega a la Gerencia de Urbanismo vuelve a ser revisado.
Así pues, la propuesta que se trasladará a la Gerencia es la de establecer una mesa de trabajo en la que se pueda aprovechar el trabajo que hasta ahora hacen los arquitectos, que no se tiene en cuenta y vuelve a ser elaborado por los técnicos municipales, lo que motiva el retraso en la concesión de las licencias.
En caso de que Urbanismo no estime oportuno este ofrecimiento, Benito fue tajante: «Que se contrate a más gente». Y es que, en su opinión, la demora en la concesión de licencias «no está motivada porque haya una mayor actividad, es porque falta personal para hacer frente al trabajo que llega».
Obras que no arrancan
El órgano colegial ha dado este paso ante «la inquietud de buena parte del colectivo de arquitectos por las quejas que reciben de los promotores para los que trabajan», quejas fundadas en los largos periodos que transcurren en la tramitación de expedientes, desde el registro de entrada del documento hasta la culminación del trámite con la obtención de la correspondiente licencia de obras o actividad.
¿Cuál es la consecuencia de estos retrasos? Benito lo resumió en una frase: «Las obras no arrancan». Sobre todo aquellas de gran envergadura, puesto que la interpretación del silencio administrativo de la Gerencia de Urbanismo genera «intranquilidad» entre los arquitectos. «Podría haber más obras en funcionamiento», sentenció el secretario del Colegio de Arquitectos.
No ocurre así con las obras menores o aquellas que no necesitan de una dirección técnica. Esas obras arrancan a la espera de que se dicte la resolución. En esta tesitura están desde la reforma de un cuarto de baño hasta la rehabilitación interior de una vivienda.
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